• Nunca imaginé

    -Version française ci-dessous.-   Ya tenía la sensación atravesada cuando llegué a casa, el hastío de un día rutinario que terminaba mal me carcomía por dentro. Podía haber hablado con Raquel cuando me preguntó cómo me había ido. Pero al verla desbordada con todos los quehaceres pendientes antes de la recepción, un “muy bien” colado a una sonrisa salió de mis labios y me puse a preparar con ella.   Luego los invitados comenzaron a llegar y el fastidio quedó camuflado detrás de mis esfuerzos por parecer ameno y divertido. Era la fiesta de inauguración de nuestro nuevo departamento. Raquel y yo esperábamos ese evento con mucha ilusión. Después de…

  • De vuelta a casa

    -Version française ci-dessous.-   Vuelvo a ocuparme de mi libro después del verano y me pregunto ¿cómo conciliar su escritura con la de mi blog que me gustaría seguir alimentando? Hasta el momento es lo que he hecho, pero ahora constato que todo lo que escribo le pertenece a mi proyecto.   Entendí que las ideas no vienen en orden. Tienen su propio flujo y hay que acogerlas el momento que llegan, aún si no sabemos a qué responden o corresponden ni hacia dónde nos llevarán.   Ahora que vuelvo a leer mis notas y algunos artículos de mi blog para poder sumergirme de nuevo en mi proyecto, me parece…

  • Fluir

    Tenía que ser paciente, si se precipitaba no lo percibiría, pero ser paciente era algo difícil para alguien que no había llegado todavía.   Desde hace mucho tiempo estaba en camino. Todos los días eran posibles metas, sin embargo, no se sentía llegar nunca. Hoy se había despertado con un presentimiento, como un impulso metido en el cuerpo, un cosquilleo en el estómago a nivel del ombligo o un poquito más arriba, que le incitaba a salir de casa.   Era una mañana soleada de octubre, los colores entraban por la ventana de su habitación. Se levantó de la cama de un salto y mientras juntaba sus prendas negras para…

  • El día en que se rompa

    Era una mañana caliente de inicios de verano, el ambiente en el café estaba animado. Gustavo y yo sentados en nuestra mesa de costumbre, esperábamos nuestro pedido hundidos en un silencio espeso. Comencé a friccionarme el cuello y la nuca y de golpe me miró y me dijo:   – Si no lo pones en palabras tu cuerpo va a explotar, se puso de pie y se fue.   Me quedé sentada en la mesa del café con la mano inerte sobre mi cuello, mientras lo veía alejarse de mí sin mirar atrás. Las conversaciones bulliciosas de la gente dispersa en la terraza del bar y sus vestimentas coloridas formaban…

  • Te lo pido

    Quizás porque sospecho que no estoy en mi sitio tengo que pedirte que te vayas. No puedo hacerlo yo, no quiero que me odies. Te confieso, no estoy seguro de nada, pero tiene que haber algo más.   Esta vida que hemos construido juntos no puede ser la mía. Parece que lo fuera porque la he vivido yo junto contigo. Pero ese no era yo, sino un impostor. Algún otro ha tomado mi lugar y me ha dejado en el camino.   ¿Que quién habla ahora? Pues el que estaba al otro lado, detrás del impostor.  Puede parecerte desquiciado, pero de pronto me siento dividido. Varias voces me hablan a…

  • ¿Por qué tener que escoger?

    Durante mucho tiempo las mujeres han tenido que escoger entre ser madres o artistas. Como si esos roles fueran incompatibles, como si con la maternidad el yo creador desapareciera detrás del yo procreador, como si satisfacer las necesidades de los niños pudiera aplacar la necesidad creativa.  ¿No es acaso todo lo contrario? Las experiencias intensas son fuente de inspiración, el movimiento llama al movimiento, la creación a la creación.   ¿Por qué tener que escoger? ¿No nos sentimos, quizás, suficientemente legítimas y capaces para asumir todo lo que somos y hemos decidido emprender?, se pregunta Nancy Huston en el “Journal de la Création”.   Es cierto que entregar su tiempo…

  • Los finales no existen

    Necesitaba estirar las piernas. Me preparé un café amargo después de escribir unas últimas palabras. El aroma del expreso recién preparado me volvió a sumergir en el universo de mis personajes. Ahí estaban de nuevo, habitando mi cuerpo como si fuera su casa.   A veces me agobian con sus presencias, como si supusieran, al igual que mis hijas, que siempre estoy disponible, que no tengo una vida fuera de ellos. Otras veces, como hoy, están tan lejos que comienzo con el temor de no encontrarlos.   No sabía cómo continuar. Aunque yo sé que lo que había sigue ahí, existe siempre un estrés de que lo que has encontrado…

  • Extracto

    del libro que me ocupa   “Encontré esa libreta.   Sabía que estaba en alguna parte. A pesar de tener la costumbre de botar todo lo que ya no tiene vigencia en mi vida, nunca he sido capaz de deshacerme de mis cuadernos de notas. Son quizás los únicos tesoros que tengo.   Puede parecer pretencioso, como si lo que pensara o sintiera tuviera tanta importancia, pero para mí un cuaderno de vida cargado de los cuestionamientos de una época tiene más valor que la cadenita y la cruz de oro que recibiste en la infancia o la sortija que te regaló algún pretendiente.   He ido dejando mis restos…

  • Mil vidas

    Lo increíble de esta aventura de la escritura, me digo yo, es que puedes inventar las realidades que quieras y vivirlas como si fueran tuyas a través de tus palabras.   Es como si se me hubiera revelado un poder. Más allá de haber encontrado mi lugar con la escritura, he descubierto una manera de reinventarme y hacer el mundo más vivible para mí.   Lo que no funciona en la vida real porque la gente que amas te abandona o porque las cosas no siempre salen a tu gusto, lo puedes recrear escribiendo. Y puedes vivir mil vidas, aquellas tuyas que por uno u otro motivo te las perdiste…

  • Disonancias

    Está paseando por el bosque cuando la foto que ha recibido por mail un par de días atrás se reproduce en su mente. Vestida con un conjunto de falda y blusa roja que sobresale del resto de tonalidades del paisaje, ella de niña junto con su padre ya muerto posan en medio de un camino de tierra rodeado de hierbas amarillentas, arbustos y algunos árboles. No tiene ningún recuerdo concreto de esa ocasión, pero reconoce el lugar.   Se trata de los valles que se extienden alrededor de la laguna de la Angostura en la ciudad de Cochabamba. A pesar de la fama que tiene la zona por su clima…